• Creemos en un solo Dios verdadero, auto-existente Creador de todas las cosas, que se ha revelado en tres personas –Padre, Hijo y Espíritu Santo– co-igual, co-eterno, y uno en sustancia. (2ª Corintios 13:14; Mateo 28:19; Efesios 2:18)
  • Creemos en la Biblia como la Palabra inspirada de Dios, la única regla infalible de fe y conducta. (2ª Timoteo 3:16-17)
  • Creemos que el hombre fue creado originalmente a la imagen y semejanza de Dios, pero cayó porque voluntariamente pecó y está separado de Dios, por lo que la salvación personal a través de la fe en la muerte y resurrección de Jesús es necesaria para cada persona. (Génesis 1:26; Génesis 2:17; Génesis 3:6, 3:24; Romanos 5:17-19)
  • Creemos en la deidad de Jesucristo, Hijo de Dios encarnado; plenamente Dios y plenamente humano. Él vivió una vida sin pecado, fue crucificado, murió y fue sepultado; Él fue resucitado de entre los muertos y está vivo para siempre. (Lucas 1:26-31; Juan 1:1, Apocalipsis 1:18; Romanos 1:4)
  • Creemos que el Señor Jesucristo vivió una vida sin pecado y perfecta que complació totalmente a Su Padre; que El murió por nuestros pecados en la cruz; pagando el juicio que demanda la Santa Justicia de Dios por el pecado; haciendo posible para Dios permanecer Justo y al mismo tiempo justificar a aquellos que han creído en Jesús (Romanos 5:12, 15-17)
  • Creemos que Jesucristo es supremo en toda sabiduría y conocimiento. (Colosenses 2:3)
  • Creemos que aquellos que por fe y sin ningún mérito de su parte reciben al Señor Jesucristo como Salvador son milagrosamente nacidos de nuevo del Espíritu Santo y se convierten, como hijos de Dios, participantes de la naturaleza divina y de la vida eterna. (Romanos 4:16, 11:6; Efesios 2:5,8; 2ª Pedro 1:4)
  • Creemos en el bautismo en agua por inmersión. Este es un acto importante de la obediencia y es esencial para que un creyente pueda caminar plenamente en su nueva vida en Cristo. (Marcos 16:16; Colosenses 2:11-12; Romanos 6:3-8)
  • Creemos en la promesa del Padre; el bautismo del Espíritu Santo, la investidura de poder, para la vida y el servicio; diferente de y subsecuente al nuevo nacimiento. Creemos que el hablar en otras lenguas como el Espíritu dirija a la persona es algo que acompaña a este bautismo y debe ser esperado y deseado por todos los creyentes como un recurso dado por Dios en la oración y la adoración para una vida llena de Espíritu. Además, creemos que todos los dones del Espíritu deben operar en la Iglesia y para la Iglesia y deben de manifestarse bajo el Señorío de Jesucristo. (Hechos 1:8; Hechos 2:4; 1ª Corintios 12)
  • Creemos que la santificación entera (el proceso de ser hecho santo) es el deseo de Dios para todos los creyentes y debe ser intensamente buscada por caminar en obediencia a la Palabra de Dios por el poder del Espíritu Santo en nuestras vidas. (Levítico 20:7; Hebreos 12:1-4; Juan 17:17; 1ª Tesalonicenses 4:3-4)
  • Creemos que la sanidad divina y la salud se imparte a todos través de la fe en la muerte de Jesús en la cruz y por su resurrección. (Salmo 103:3, Isaías 53:4-5; Mateo 8:17; 1ª Pedro 2:24; Santiago 5:15)
  • Creemos que Dios quiere que nosotros prosperemos en cada área de nuestra vida –espíritu, alma y cuerpo. (1ª Tesalonicenses 5:23; 3ª Juan 2)
  • Creemos en una fe que obra por el amor para que Cristo pueda ser formado en nosotros y nos llevará a alcanzar la unidad de nuestra fe. (Gálatas 4:19; Efesios 4:13)
  • Creemos que Dios vive en nosotros, la Iglesia; compuesta de cada creyente nacido del Espíritu Santo. Juntos a través de todo el mundo, creamos un cuerpo espiritual, siendo edificado continuamente por la obra de Dios en nuestras vidas y por medio de animarnos unos a otros. (1ª Corintios 12:12; 2ª Corintios 6:16; 1ª Corintios 3:16; Hechos 16:5; Marcos 16:15)
  • Creemos en la resurrección de los que duermen en Cristo y su arrebatamiento junto con los que permanecen hasta la venida del Señor. Para recibir al Señor en las nubes cuando venga a establecer su Reino. (1ª Corintios 15: 51-52; 1ª Tesalonicenses 4:16-17)
  • Creemos en el retorno de Jesucristo, en el reinado Milenial de Cristo, antes del establecimiento del Reino Eterno. El reino Milenial será inaugurado en su segunda venida; cuando Satanás será atado. (Tito 2:13; Apocalipsis 20:1-7)